En Costa Rica, a qué le llamamos cerco?
Este es un término poco utilizado en la actualidad, pero todavía conocido o usado por la población adulta mayor en Costa Rica, y en zonas rurales. Carlos Gagini en su Diccionario de Costarriqueñismos publicado en el siglo XIX define el «cerco» como un cercado, propiedad rústica pequeña, solar, huerto o cortijo; mientras que Arturo Agüero en su Diccionario de Costarriqueñismos (1996) define el «cerco» como un terreno cercado, adyacente a la casa, comúnmente cultivado de cafetos, plátanos, chayotes, algún árbol frutal, etc. (p. 63).
En el contexto campesino, el» cerco» se refiere al solar o patio contiguo a la casa, caracterizado por ser una fuente inmediata de alimentos variados, donde se presenta un máximo aprovechamiento del área delimitada, con una siembra de productos de consumo usual, pero también con la disponibilidad de alimentos silvestres que crecen en el cerco, cuyas semillas son dispersadas por aves, murciélagos e insectos.
En un típico cerco de una casa campesina costarricense es posible encontrar matas de plátano, camote, yuca, culantro coyote, árboles frutas como guayaba, limón, mango o nísperos, chicasquil, tomate, chile dulce, culantro castilla, un arbusto de orégano o tomillo, hierbas medicinales, una chayotera, una mata de ayote, entre otros. Las cercas vivas que delimitan la porción de terreno, también pueden ser fuente de alimento, entre ellos arbustos de chicasquil, itabo u otros productos.
Desde el punto de vista de seguridad alimentaria y nutricional familiar, el «cerco» significa una gran riqueza alimentaria de alto valor, puesto que en una pequeña porción de tierra se encuentra accesible una variedad de alimentos, con los cuales se basa el menú familiar. Un cerco, tal como se mantenía en la antigüedad, puede proveer la mayoría de alimentos para una olla de carne o un picadillo.
Con el proceso de urbanización, las personas poco a poco comenzaron a construir sus casas en porciones de terreno cada vez más pequeñas, con lo cual se fue limitando o eliminando las áreas para siembra y el conocido «cerco». A ello se sumó la merma de cafetales y la menor práctica de sembrar productos para auto consumo, como la siembra de maíz.
El término «cerco» tal como se conoce en Costa Rica es también utilizado en otros países en América Latina. Por ejemplo, en Argentina es común su uso, asociado a una práctica productiva ancestral habitual dentro del sistema de vida campesino, con gran relevancia en la seguridad alimentaria y nutricional familiar. Las personas cuentan con una pequeña finca en la cual se encuentran sus viviendas, y en el área delimitada con cercas vivas, próxima a la casa, donde se procura disponer de varios productos sembrados para auto consumo, animales de granja y hasta pequeños lagos con peces.
El cerco forma parte de los modos de vida rural, con una participación de la familia en su cuidado, y una distribución de tareas respecto a cómo mantener limpia el área de las malas hierbas, y contribuir en la recolección de los productos y la vigilancia de que plagas o animales no dañen los productos sembrados.
Además de contar con policultivos, en el cerco se puede disponer de gallinas como fuente de huevos y carne, cerdos, una vaca o cabra para leche o queso, con lo cual se complementa la alimentación.
Estudios sobre el cerco como unidad agroproductiva destacan grandes beneficios desde la dimensión agroecológica, tomando en cuenta la conservación de la biodiversidad alimentaria, la protección y uso de suelos. También se destaca el mínimo de inversión en la producción, puesto que los animales son criados alrededor de la casa y a monte abierto; además, que la siembra es por esquejes o semillas disponibles localmente, no compradas, obtenidas del medio. Ello implica un conocimiento de la familia de los recursos alimentarios disponibles en los lugares donde viven, y un máximo aprovechamiento comestible.
Mata de chayote se extiende en el cerco. Fotografía de Patricia Sedó Masís, Proyecto EC-436 Escuela de Nutrición UCR, 2013.
Fuentes bibliográficas consultadas:
Agüero A. (1996). Diccionario de Costarriqueñismos. San José: Asamblea Legislativa. Recuperado de: https://www.acl.ac.cr/dcaa.pdf
Gagini C. (2008). Diccionario de Costarriqueñismos 1865-1925. 4 edición. San José: Editorial Costa Rica.
Helman J. (2017). El cerco como espacio de producción agrícola familiar campesina en Santiago del Estero,
Argentina. RIA. Revista de Investigaciones Agropecuarias, v43 (2): 175-185, agosto. Recuperado de: https://www.researchgate.net/publication/320110069_El_cerco_como_espacio_de_produccion_agricola_familiar_campesina_en_Santiago_del_Estero_Argentina
*Nota elaborada por Patricia Sedó Masís, Proyecto EC-436, Escuela de Nutrición UCR. 27 de setiembre 2023.